El reinado más corto de la historia fue el del Príncipe Luís Felipe I de Portugal, que fue fatalmente herido al mismo tiempo que su padre moría en Lisboa, el 1 de Febrero de 1908.
Quiso la casualidad que ambos murieran, primero el padre y al rato el hijo. Por lo tanto, en ese lapso de tiempo, el príncipe pasó a ser Rey de Portugal... por veinte minutos, pasando a la historia como el reinado más breve de todos los tiempos, aunque parece ser que ni siquiera fue un reinado.
Carlos I, su padre, fue acribillado en medio de una multitud por fanáticos republicanos pertenecientes a la organización terrorista Carbonaria, muriendo en el acto, mientras que Luis fue herido de gravedad y su hermano menor, Manuel, fue alcanzado en un brazo. Como ya hemos mencionado, y aunque fue atendido por los doctores, Luis murió veinte minutos más tarde que el rey.
Quiso la casualidad que ambos murieran, primero el padre y al rato el hijo. Por lo tanto, en ese lapso de tiempo, el príncipe pasó a ser Rey de Portugal... por veinte minutos, pasando a la historia como el reinado más breve de todos los tiempos, aunque parece ser que ni siquiera fue un reinado.
Carlos I, su padre, fue acribillado en medio de una multitud por fanáticos republicanos pertenecientes a la organización terrorista Carbonaria, muriendo en el acto, mientras que Luis fue herido de gravedad y su hermano menor, Manuel, fue alcanzado en un brazo. Como ya hemos mencionado, y aunque fue atendido por los doctores, Luis murió veinte minutos más tarde que el rey.
Al no contemplarse en la monarquía portuguesa la sucesión automática, Luis nunca fue rey, pese a haber sobrevivido a su padre. Tras sus muertes, la corona portuguesa fue heredada por su hermano Manuel II, que se convirtió en el último rey de Portugal, destronado por la Revolución Republicana dos años después, en octubre de 1910.
A modo de curiosidad, Luis Felipe, conocedor de las amenazas de muerte a su padre, iba siempre armado con un revólver, para defenderse cuando fuera preciso, jurando siempre que lo matarían a él antes que permitir que le pasara nada a su padre, y digamos que casi se cumple.
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